Majestuosa diosa guerrera, dió su nombre a la ciudad de Atenas. En tiempos de paz se la representa con un huso en la mano, también fué representada como un búho. Dos serpinetes entrelazadas se dejan ver en su escudo o en la orla de su túnica.
Su aptitudes marciales y domésticas abarcan la planificación y la ejecución, actividades que exigen una manera de pensar decidida, el sentido práctico que se clarifica en la estrategia. Defiende el dominio de la voluntad, y el intelecto sobre el instinto. Es el arquetipo de las mujeres lógicas, que son gobernadas por sus cabezas más que por sus corazones. Algo que desafía las concepciones masculinas sobre la mujer. Cuando Atenea entra en la psique de una mujer está motivada por sus propias prioridades en lugar de enfocarse a las prioridades de los demás.
Aunque podría extenderme más, creo que es más importante ilustrar lo que de Atenea hay en mí, y que está intimamente relacionado en el tejido.
Con su serpiente en la cintura.
